La magia de las Tierras dracónicas suele evadir cualquier intento escolar de definirla. Como académicos, solo podemos intentar comprender lo mejor posible sus peculiaridades, aunque quizás eso sea lo que hace que este sitio sea tan magnífico. Este texto recoge nuestros conocimientos de esta región. Recordatorio: lo que se descubre en este misterioso archipiélago depende por completo de la amplitud de miras y la capacidad imaginativa de uno mismo.
Desde el turbulento Islote tempestuoso hasta el corrupto Reino susurrante, estas criaturas mágicas reinan sobre los cielos y mares de Tierras dracónicas.
El poderoso rugido de Ao Shin, el dragón de la tempestad, hace que se estremezcan los cielos y mares por igual, envolviendo su reino con salvajes tormentas. ¡Invoca rayos que caen del cielo para aterrorizar a cualquiera que se atreva a retarlo!
Antaño, Aurelion Sol, el dragón astral y el antediluviano Forjador de Estrellas, recorrió el reino celestial por su cuenta. Ahora ayuda a los campeones astrales en la Convergencia abriendo agujeros negros en el mismísimo tejido del espacio-tiempo y lanzando a sus enemigos al cosmos.
Daeja cabalga corrientes de viento, tan incansables como su propio espíritu, por todo el reino de los espejismos. Busca a su pareja, a la que perdió hace tiempo, con la esperanza de reencontrarse con él algún día. Mientras tanto, desata vendavales llenos de pena y sufrimiento contra cualquiera que se interponga entre ella y su misión.
Idas, la dragona de Brilloescama, destruyó a sus devotos adeptos cuando descubrió que solo buscaban su fortuna. Ahora se escuda con escamas doradas, con las que recuerda desesperada cómo la veneraban. Además, esto también le otorga velocidad y mejora su capacidad curativa.
En las leyendas, se suele representar a la dragona Shi Oh Yu, un símbolo de paz y serenidad, como una estatua de jade. Esa forma le otorga protección y la sabiduría necesaria para acceder a las técnicas de lucha de sus discípulos.
Antaño, Shyvana, la cambiaformas de Alafuria, dejó que la furia de su forma dracónica devorase por completo su humanidad. Despertad su ira bajo vuestra propia cuenta y riesgo... Es famosa por lanzarse en picado hacia el campo de batalla y arrasar legiones enteras con su aliento ígneo.
El dragón Sy'fen, que enloqueció por culpa de la magia prohibida, ahora arrasa el Reino susurrante. Se alimenta de las desdichadas almas con las que se topa, dejando tras de sí destrucción y desesperación.
Aunque multitud de mortales se enfrentan al peregrinaje para dejar ofrendas en los santuarios dracónicos, solo unos pocos elegidos reciben el favor mágico de los aumentos dracónicos.
Una magia inestable transforma al campeón de vuestro banquillo que se encuentra más a la izquierda.
Por parejas, los campeones potencian sus puntos fuertes entre sí.
Ordenad a vuestras unidades que aguanten su posición y ganad una fortuna inimaginable.
Ahorrad oro..., pero la experiencia os costará algo más.
Burlad a la muerte una vez y preparad vuestra venganza.
Una gran diversidad de personas y todo tipo de bestias han convertido las Tierras dracónicas en su hogar. ¡Descubrid más sobre este fantástico crisol de atributos!
Los campeones astrales invocan orbes de vez en cuando, y dichos orbes recompensan con creces el poder astral. ¡Infunden las habilidades de los campeones con el inimaginable poder del propio cosmos!
Los dragones son criaturas territoriales, por lo que solo ayudan a aquellos mortales que no han buscado obtener el favor de otros dragones. Además, necesitan espacio adicional para maniobrar, aunque obtienen vida y puntos de atributo.
El punto fuerte de los campeones del gremio parecen ser sus diferencias, pues cada uno de ellos otorga una mejora única que aporta equilibrio al grupo. El trabajo en equipo hace los sueños realidad, como se dice.
Los campeones de Jade invocan decididas estatuas imbuidas de una misteriosa magia, que se ve potenciada por el poder de los demás aliados de Jade.
Con los campeones de Espejismo, nada es lo que parece. Reciben bonificaciones tan cambiantes como la marea... Un momento, ¿de qué estábamos hablando?
Impulsados por la furia, en lugar del maná, estos campeones reciben mejoras especiales cuando se dejan llevar por su ira. Además, son incapaces de aguantar una broma.
Estos campeones adoran disfrutar y... deleitarse, ¡en cualquier ocasión! Siempre que estos campeones se lancen al campo de batalla, tened cuidado con la pirotecnia errante.
Los destrizaescamas no tienen en alta estima a los dragones, y solo son capaces de desatar su verdadero potencial cuando no tienen que compartir con ellos la gloria en el campo de batalla. Probablemente, sea mejor así. No hay huecos en el tablero para tanto ego.
Los campeones de Brilloescama obtienen el acceso exclusivo a un catálogo de poderosos objetos. Sin duda alguna, no compartirán su fortuna, aunque les encanta decir que igual os pueden "colar en la lista...".
Gracias a que tienen a su disposición la magia de infinidad de líneas temporales, los robahechizos pueden mangar encantamientos de sus dimensiones favoritas (e incluso de aquellas que odian).
¡Presenciad el poder de las estrellas! Cuando una invocación estelar recurra al poder de los cielos por primera vez en batalla, los estrategas pueden curarse esa misma cantidad.
Los campeones de Tempestad dejan caer la furia del cielo sobre sus enemigos, y atacan a toda velocidad (si intentan daros un apretón de manos, lo mejor será que lo rechacéis, a menos que os guste la idea de que se os pongan los pelos de punta).
Si os suena apasionante la idea de domar a vuestra propia cría de dragón, es imperativo que llevéis aperitivos suficientes... De lo contrario, ¡la cría podría confundir vuestros dedos con una alternativa apropiada!
Aquellos que habitan el Reino susurrante reducen el tamaño de sus enemigos, literalmente: drenan la armadura y la resistencia mágica de sus objetivos. ¡Me estremezco al pensar qué pasaría si se topasen con una víctima diminuta!
Estas tierras pueden llegar a ser muy volubles, al igual que sus alados soberanos. Durante siglos, los lugareños han aprendido a adaptar sus costumbres y atributos a tales caprichos mágicos.
En multitud de ocasiones, hemos observado la habilidad de los asesinos para saltar grandes distancias y asestar golpes críticos con una precisión letal. Estos asesinos no son la excepción que confirma la regla.
Sin duda alguna, el bardo es una criatura de lo más peculiar, y poco se sabe de los "doots" que regala a sus aliados bailarines... Solo sabemos que ese regalo parece atraer a campeones legendarios.
No cabe duda, ¡los luchadores pueden aguantar todo lo que les echen! Ofrecen una robusta mejora de vida a sus aliados, y el doble para ellos mismos.
Los cañoneros, que siempre van armados con artillería explosiva, pondrán a raya incluso al más rudo oponente con cada quinto ataque.
Encontraréis a los jinetes liderando la carga. Además, obtendrán armadura y resistencia mágica cuando se lancen de cabeza a la batalla. Son aliados de lo más valientes, y oponentes terroríficos.
¡La simbiosis entre dragones y dragomantes es de lo más fascinante! Los dragomantes potencian la vida y las habilidades del dragón ancestral al que hayan elegido, cantidad que aumenta con cada nivel de estrellas.
Allí donde haya maná, ¡habrá un evocador drenándolo! Siempre que se lance una habilidad, se restaura su maná. Una maravilla de la eficiencia, ¿no os parece?
Si os encontráis en un apuro, ¡pedid a un guardián que os preste su escudo! Los guardianes otorgan protección a su aliado más cercano, y a ellos mismos, tras perder la mitad de vida por primera vez.
La leyendas os obligarán a hacer el sacrificio definitivo, ¡cuando consuman por complejo a un aliado adyacente! Sin embargo, su sacrificio no será en vano, dado que las leyendas absorben la vida y la armadura de sus adeptos fallecidos.
Según lo que sugieren nuestras observaciones, los magos sacan poder del propio poder, por lo que utilizan sus habilidades dos veces y potencian las habilidades de todos los magos aliados.
Pocos están tan familiarizados con los entresijos de la hechicería como los místicos. Gracias a eso, pueden proteger fácilmente a sus aliados de todo tipo de travesuras mágicas.
La vida de los cambiaformas se transforma al mismo tiempo que ellos, otorgándoles más y curándolos al mismo tiempo. Sus formas secundarias son maravillosas (¡aunque os recomendamos observarlas desde lejos!).
Las unidades de Tiroveloz, que resultan increíblemente difíciles de rastrear, destacan en la distancia y depende de sus pulidos reflejos para desenfundar rápido.
Por naturaleza, los guerreros ofrecen pocos matices, ¡y nos parece espléndido! Hay que llamar a las cosas por su nombre. Cada golpe de su arma tiene una probabilidad de potenciar su siguiente ataque.
Existen tantas hipótesis sobre el origen del Dragón del tesoro como eruditos hay en las Tierras dracónicas, pero un mismo dato permanece constante en todas las discusiones intelectuales: a pesar de su benevolente y generosa naturaleza, parece espantar a los picuchillos. Aceptad gratis la primera oferta del dragón... o gastad tantas monedas como queráis para descubrir un tesoro distinto.